¿Vacunar o no vacunar?
¿Te has preguntado si el virus del papiloma humano te puede afectar a ti o a tus hijos? ¿Eres portadora y no sabes si te puedes vacunar? ¿Vacunar a tus hijos es seguro y eficaz? ¿Te preguntas a qué edad hacerlo?
En el último número del New York Times sección de salud podéis leer este titular: “Short answers to hard questions about HPV” (respuestas sencillas a preguntas difíciles sobre el virus del papiloma humano). En efecto, las preguntas que plantea el virus del papiloma humano (VPH) son muchas y complejas.
La razón por la que se publica este artículo es importante: acaba de saberse que la mitad de los americanos de entre 18 y 59 años son portadores del VPH; el 20%-25% están infectados por las cepas más peligrosas y que 31.000 cánceres son provocados cada año por estos virus. La buena noticia de todo esto es que la vacuna contra el virus es muy eficaz, especialmente si se administra en la adolescencia precoz.
El VPH no es solo un virus sino que en realidad es una familia numerosa con más de 150 miembros (genotipos). Estos virus generan 3 tipos de problemas para la salud: 1/ cánceres anogenitales (cuello uterino, vagina, vulva, pene y ano); 2/ cáncer de orofaringe y 3/ verrugas genitales.
De todos los serotipos, 13 han mostrado aumentar el riesgo de cáncer de cuello uterino. Los más peligrosos son los serotipos 16 y 18: el 66% de todos los cánceres asociados al VPH son debidos a estos 2 serotipos. El resto: 31, 33, 45, 52, y 58 – y otros en menor medida- son responsables del 15% restante de casos. El 90% aproximadamente de las verrugas genitales son causadas por los genotipos 6 y 11.
El virus se transmite muy fácilmente por contacto piel con piel/mucosas, sexo oral o genital-genital. No es una infección exclusivamente de gente promiscua. La mayor parte de los virus son eliminados por el sistema inmunitario en los 2 años siguientes al contagio pero algunos persisten y generan lesiones.
No busco en este post abarcar todo el tema del cáncer de cuello uterino, de su prevención en general, de su diagnóstico precoz, de su tratamiento,… Ya tenéis algunos posts en nuestro blog. Solamente me ceñiré a mi opinión sobre la vacunación contra el VPH.
Empezaré mostrando mis cartas abiertamente: creo que la vacunación de las niñas -y de los niños-adolescentes es la mejor manera de reducir el riesgo de que en el futuro desarrollen un cáncer de cuello uterino. Además, creo que la misión de los ginecólogos es esencial a dos niveles:
1- Deben educar a los padres de niñas y niños en edad de vacunación (entre los 11-12 años): la vacuna es eficaz y muy segura. Ha pasado ya una década desde las primeras vacunaciones y se ha hecho patente una disminución en la tasa de infección y de lesiones en las chicas vacunadas.
2- Deben recomendar las inyecciones incluso fuera de este rango de edad. Las niñ@s se pueden vacunar a partir de los 9 años y a partir de los 13 hasta los 26 años de edad. Es posible que las mujeres de más de 26 años también se beneficien de la vacunación pero hay menos datos al respecto.
A partir de ahora, me referiré solamente a las niñas dada mi condición de ginecólogo.
El esquema de vacunación dependerá de la edad de la paciente:
– Las niñas de menos de 15 años sólo necesitan 2 dosis (la basal y otra a los 6-12 meses); si no se pueden dejar pasar 6 meses entre las 2 dosis, hará falta una 3ª dosis a los 6-12 meses de la primera (ver a continuación).
– En niñas de más de 15 años harán falta 3 dosis (basal, a los 2 meses y a los 6-12 meses).
Es importante saber que no es necesario testar a las pacientes antes de vacunarlas ya que la inyección es beneficiosa incluso en pacientes portadoras del virus. Tampoco se debe negar la vacuna a pacientes con citologías anormales o verrugas genitales. Obviamente, habrá que indagar sobre si la paciente presenta alergias y retrasar la vacunación en caso de que la paciente tenga fiebre leve-moderada.
¿Qué hacer con las embarazadas? Se recomienda no vacunarlas hasta que finalice la gestación y las pacientes que se embarazan a mitad del esquema de vacunación deberán interrumpirlo y reiniciarlo tras el parto. Sin embargo, se puede vacunar a las madres que están dando de mamar.
Recordad que el efecto de las vacunas es duradero y no hace falta un recordatorio con el tiempo.
Para más info sobre el tema: vacunas incluidas y financiadas en el calendario de vacunación de Valencia.
Estaré encantado de responder a vuestras dudas en consulta o a través del mail: a.millet@clinicamillet.es
Antón Millet
Ginecólogo en Clínica Millet
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Clínica Millet - Clínica de la Mujer
Médicos especialistas en ginecología, reproducción, diagnóstico prenatal, preparto y posparto, pediatría, endocrinología, deporte, psicología y medicina estética en Valencia.