“Antón, ¿hasta qué edad me puedo embarazar sin riesgos?” Es una pregunta recurrente que me hacen a mí – y a todos los ginecólogos-. Y la respuesta no es obvia: los efectos de la edad sobre la gestación aumentan de forma continua y no existe una edad por encima de la cual los efectos se “disparen”. Algunas pensaréis que a partir de los 35 años la fertilidad disminuye… es verdad. Pero también es verdad que la mayoría de las mujeres de 40-45 años que consiguen una gestación llegan a término satisfactoriamente.
En los países occidentales, el porcentaje de mujeres que gestan por encima de los 35 años es cada día mayor. No voy a entrar en cifras y tampoco voy a analizar las causas – sociales, económicas…- de este hecho. ¡¡¡Se podría escribir un libro!!! En Clínica Millet, el 30% de las gestantes tienen más de 35 años y un 15% tienen más de 38 años.
¿Qué complicaciones afectan a las pacientes “mayores”? La verdad es que no son distintas a las que presentan las embarazadas; lo que aumenta es su incidencia.
Por orden cronológico destacaría las siguientes:
- Infertilidad: es más probable abortar a lo largo de toda la gestación.
- Malformaciones: mucho más frecuentes.
- Complicaciones como la hipertensión, la preeclampsia, la diabetes. Muchas de estos problemas llevan a la prematuridad.
- Problemas placentarios (desprendimiento de placenta, placenta previa).
- Partos vaginales y cesáreas: los partos vaginales con más largos y complejos. Las cesáreas son más frecuentes.
Os voy a intentar resumir lo más importante de cada uno de estos puntos.
Por lo que respecta a la incidencia de abortos, es obvio que aumenta con la edad. Aquí tenéis los números:
- Edad < 30 años: 12%.
- Edad 30-34 años: 15%.
- Edad 35-39 años: 25% .
- Edad 40-44 años: 51%.
- Edad > 45 años: 93%.
Añado aquí una nota: si conocéis a alguna mujer de más de años que sigue tomando precauciones para no embarazarse… tranquilizadla ;-).
¿Y qué pasa cuando conseguimos una gestación y ésta va adelante? ¡Lo que más me asusta son las malformaciones! Aquí encontraréis los posts que hemos ido subiendo a nuestro blog en los últimos años: https://clinicamillet.es/categoria/embarazo/diagnostico-prenatal/
El riesgo de alteraciones cromosómicas aumenta con la edad – trisomías 13, 18 y 21 o síndrome de Down. Si hablamos específicamente del síndrome de Down, su incidencia se mantiene en niveles bajos hasta los 30 años; a partir de ahí empieza a aumentar: a los 35años alcanza los 4/1000 nacimientos y sigue aumentando exponencialmente con la edad.
Con el aumento del riesgo de síndrome de Down, también aumenta la fiabilidad de los tests de cribado y la tasa de falsos positivos y negativos. Yo explico minuciosamente en qué consisten el triple screening, el cribado genético no invasivo y las pruebas invasivas (biopsia de vellosidades coriales y amniocentesis). Suelo recomendar a todas mis pacientes de más de 35 años que se hagan un cribado genético no invasivo: es muy fiable. ¿Es caro? Cuesta unos 500 euro y cada uno toma la decisión que considera mejor… Yo sólo digo que aporta una gran tranquilidad.
Dado que el riesgo de malformaciones fetales no relacionadas con cromosomopatías también está aumentado en mujeres de más de 35 años se ha propuesto la realización de una ecografía de alta definición en segundo trimestre de embarazo; esta ecografía buscaría detectar anomalías estructurales, especialmente cardiacas. Sin embargo, la utilidad de esta ecografía de segundo trimestre no ha sido demostrada. En Clinica Millet solemos pedirla si ha salido un triple screening positivo pero un cribado genético no invasivo negativo. También si tenemos alguna duda en la eco de la semana 12. El corazón es el órgano que se desarrolla mal con frecuencia y, aunque la mayoría de las malformaciones cardiacas son leves, algunas pueden ser muy graves. Es necesario que las ecografías Doppler de semana 20 sean realizadas por personal muy cualificado y que su relación con el ginecólogo de las pacientes sea estrecha. Por ello, siempre insisto en hacerlas en Clínica Millet.
No voy a extenderme hablando de la diabetes gestacional, la preeclampsia o los problemas placentarios. Ya se han comentado en este blog y no quiero repetirme. Sólo os diré que cuando estos problemas se producen, con frecuencia obligan a finalizar tempranamente el embarazo y aumentan las tasas de prematuridad.
Me detendré en el parto. Numerosos estudios demuestran que los casos de distocia – partos que no evolucionan bien- aumentan y que incluso en los partos que van bien, los tiempos se alargan.
Las cesáreas también son más frecuentes con la edad. Un estudio ya clásico comunicó estas tasas: 20% con 25-34 años, 26% con 35-39 años, 31% con 40-44 años, 36% con 45-49 años y 61% con más de 50 años. Me parece que en la actualidad estas tasas se quedan cortas.
Este post no tiene por objeto asustarte si tienes más de 35 años y estás embarazada. Al contrario: tienes a priori un buen pronóstico y lo más probable – con diferencia- es que tengas un bebé sano. Sin embargo, no puedes desconocer que los riesgos son significativamente mayores con el pasar de los años.
¿Mi consejo? No demores demasiado la gestación ?.
Antón Millet
Clínica Millet
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Clínica Millet - Clínica de la Mujer
Médicos especialistas en ginecología, reproducción, diagnóstico prenatal, preparto y posparto, pediatría, endocrinología, deporte, psicología y medicina estética en Valencia.