La tranquilidad de saber que todo empieza bien…
La ecografía del primer trimestre o de semana 12, es junto con la ecografía morfológica, las más importante del embarazo. El momento ideal para hacer esta exploración es entre las semanas 11 y 13.
Sus dos principales objetivos son evaluar la anatomía fetal y contribuir a descartar precozmente un síndrome genético.
Por lo que respecta al diagnóstico precoz de un síndrome genético, la relevancia de la ecografía de la semana 12 ha disminuido. Ahora hay 2 opciones de cribado o screening para el síndrome de Down:
- Cribado combinado del primer trimestre: se hace una cálculo del riesgo que tiene el feto de tener síndrome de Down, de Edwards y de Patau, tras la combinación de la edad materna, los niveles hormonales (analítica) y marcadores ecográficos (la traslucencia nucal o pliegue nucal).
- Cribado genético no invasivo o detección de DNA fetal libre en la sangre materna. Es un test que permite detectar DNA del feto en la sangre de la madre y nos permite saber con mayor fiabilidad el riesgo que tiene el feto de tener síndrome de Down, de Edwards y de Patau.
Sin embargo, no olvidemos que ambas opciones son pruebas de cribado, es decir no nos dicen con una seguridad del 100% que el feto no tenga alguno de estos síndromes, – aunque se aproximan mucho, especialmente el cribado genético no invasivo).
Nos fijamos en los marcadores de cromosomopatía: ayudan a saber si el embrión tiene posibilidades de tener un síndrome génetico (síndrome de Down, de Edwards y de Patau…):
- Traslucencia nucal/pliegue nucal: acúmulo de líquido que tienen los embriones a nivel de la nuca que en función de su cantidad puede tener mayor riesgo de síndrome de Down o malformaciones.
- Hueso nasal: confirmar la presencia del hueso de la nariz (ver foto 1).
- Ductus venoso: vaso sanguíneo que está presente en los fetos y que comunica el cordón umbilical con el corazón.
- Ingurgitación tricuspídea: valoramos el funcionamiento de la válvula del corazón que comunica aurícula con ventrículo derecho.
Respecto al estudio anatómico de la anatomía fetal, la ecografía de semana 12 permite determinar si se trata de una gestación única o múltiple, la localización de la placenta y la cantidad de líquido amniótico que hay. También permite valorar la viabilidad fetal, con el latido cardíaco y los movimientos fetales.
Medimos el feto de cabeza a nalgas – CRL o longitud cefalo-raquídea-. Esta medida es muy importante porque permite saber si el embarazo está bien datado, es decir, si la longitud fetal corresponde a la edad gestacional medida por fecha de última regla (FUR). Si las medidas no coinciden, tomaremos el CRL como referencia para datar el embarazo. Los embriones a estas semanas suelen medir entre 45 y 84 mm.
Aprovechamos esta exploración para valora la anatomía precoz, es decir, vemos lo que se puede a estas semanas de gestación, ya que el feto todavía es pequeño y no se puede valorar con detalle:
- Cráneo y cerebro
- Corazón bien orientado, y latído cardíaco
- Estómago
- Vejiga urinaria
- Columna vertebral
- Extremidades superiores e inferiores.
En semana 12 es posible intuir el sexo fetal aunque es mayor la probabilidad de error.
Por tanto, la ecografía de semana 12 es importante porque ayuda a conocer el riesgo de que el embrión/feto padezca un síndrome genético y porque ayuda a comprobar su bienestar. ¿Sus limitaciones? el feto es todavía muy pequeño y la capacidad de diagnosticar eventuales malformaciones es baja.
Dr. Carlos Pascual. Clínica Millet
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