fbpx

Hormonas en la menopausia y riesgo de cáncer de mama

¿Todavía no conoces la eficacia y la seguridad de los tratamientos hormonales para combatir los síntomas de la menopausia?

En 5 minutos de lectura entenderás lo esencial…

En mis primeros años como ginecólogo, allá por el año 1998, el tratamiento de los síntomas menopáusicos con hormonas – estrógenos o estrógenos y progesterona, en forma de parches o cremas- era algo habitual. El tratamiento con estrógenos asociados a progesterona es necesario en mujeres con útero; en mujeres sin útero no es necesario administrar progesterona. Estos tratamientos eran demandados por muchas mujeres y parecían la fórmula de la eterna juventud. La industria farmacéutica, por supuesto, potenciaba intensamente esta demanda.

Esta fiebre contrastaba con algo que los médicos sabían bien: los estrógenos endógenos aumentan el riesgo de cáncer mamario. La evidencia era – y es- abrumadora: las mujeres posmenopáusicas con mayores niveles de estrógenos en sangre tienen más riesgo de padecer la enfermedad; ocurre los mismo con las que tuvieron una primera regla temprana, un primer parto tardío, una menopausia tardía, un número menor de hijos o que dieron menos de mamar. ¿Qué tienen en común todas estas circunstancias? una exposición más larga e intensa a los estrógenos.

Como no podía ser de otra forma, no tardaron en publicarse estudios observacionales – más de 52.000 mujeres- que sugerían que, por cada año de tratamiento hormonal, el riesgo de cáncer de mama aumentaba en un 2,5%. La comunidad científica decidió diseñar un potente estudio – estudio WHI- para aclarar el efecto real de las hormonas: la publicación de los resultados del WHI cambió radicalmente la forma de actuar a partir de entonces…

El estudio WHI constaba de dos ramas: una de pacientes tratadas con estrógenos y progesterona (E+P) y otra de mujeres tratadas sólo con estrógenos (E). Ambas ramas se comparaban con un grupo control tratado con placebo. Los resultados confirmaron lo que muchos médicos sospechábamos: por cada 10 000 mujeres tratadas con E+P durante 5 años se produjeron 8 casos más de cáncer de mama que en el grupo placebo (https://clinicamillet.es/blog/hormonas-y-cancer-de-mama/). La interrupción del tratamiento conllevó una progresiva reducción del riesgo: a los 2.5 años el riesgo ya era igual al de las pacientes tratadas con placebo. Una curiosísima observación del estudio es que las pacientes tratadas con estrógenos – sin progesterona- tenían un riesgo 25% menor que las pacientes tratadas con placebo. ¡Los estrógenos administrados sin progesterona reducían el riesgo de cáncer de mama! Este efecto protector no se había observado anteriormente y sigue sin explicación en la actualidad.

Otras observaciones interesantes fueron: los tratamientos con estrógenos – sobre todo si asociados a progesterona- aumentaban la densidad mamaria en las mamografías dificultando la interpretación de estas. Por otro lado, el riesgo de cáncer de mama aumentaba a partir del cuarto año de tratamiento, sea éste con estrógenos o con estrógenos y progesterona. En el estudio WHI, el riesgo de tratar con E+P aumentó a partir del 3º año:

Todos los estudios coinciden en que a los 5 años de interrumpir el tratamiento el riesgo se equipara al de las mujeres que nunca han sido tratadas. El pronóstico de los tumores de pacientes tratadas con hormonas es similar al de los tumores no asociados a tratamiento.

En las mujeres con historia familiar de cáncer de mama no parece que el impacto de los tratamientos sea mayor; sin embargo, dado que el riesgo base de estas pacientes es mayor, el riesgo absoluto conferido por las hormonas también lo es. Por último, en pacientes que han padecido un cáncer de mama está contraindicada la administración de estos tratamientos.

Explicar todo esto a mis pacientes menopáusicas que acuden con sofocos, alteraciones de sueño, irritabilidad,… no es siempre sencillo: ¡han pasado de exigirme ser tratadas a no querer ni oír hablar de “las hormonas”. En general, recomiendo los tratamientos durante 4 o 5 meses al año – durante los meses cálidos-. Explico a las pacientes que se administren las menores dosis necesarias, durante el menor tiempo necesario. En la actualidad hay estudios en marcha analizando al eficacia y seguridad de tratamientos hormonales sin progesterona. Creo que la última palabra no está dicha todavía y que en los próximos años nuevos fármacos permitirán mejorar significativamente la calidad de vida de las mujeres menopáusicas.

Estaremos aquí para contarlo….

 

Dr.Antón Millet • Ginecólogo

 

------ ginecologos valencia-
Clínica Millet - Clínica de la Mujer
Médicos especialistas en ginecología, reproducción, diagnóstico prenatal, preparto y posparto, pediatría, endocrinología, deporte, psicología y medicina estética en Valencia.

6 comentarios en “Hormonas en la menopausia y riesgo de cáncer de mama”

  1. Excelente articulo doctor, pero si los datos que UD da son tal cual, que no lo dudo, por que no tiene constancia de esto todos los ginecólogos.????? Me están tratatando tal como UD indica que no es recomendable y además me he puesto 14 kilos y las hormonas me irritan mas todavía con lo que para compensar también me dan diazepan. Lastimas que sea UD una clínica privada y no pueda ir, pero bueno, imprimo su informe, dejo el tratamiento y en la próxima revisión les pongo al día. Muchas gracias doctor.

    1. Hola Olga,

      Cada paciente es un caso especial y lo que lees no tiene xq ser aplicable a ti al pie de la letra. Habla con tu ginecólogo sobre el tema y ya me cuentas qué te ha dicho.

      Un saludo.

      Antón.

  2. Lidia vicent

    Hola Antón, y que sucede con las píldoras anticonceptivas? Tengo entendido que son hormonas también (estrógenos y progesterona). Las mujeres de hoy en día las usan años y años…. Esas dosis diarias durante tanto tiempo de hormonas mas las que fabrica nuestro cuerpo de forma natural, pueden a la larga provocar Cancer de mama?

    Un saludo

    1. Hola Lidia,

      ¡Es una muy buena pregunta! La respuesta clara y rotuna es que NO. Las píldoras anticonceptivas de dosis bajas – las actuales- no aumentan el riesgo de padecer un cáncer mamario. No se sabe exactamente el porqué pero parece que el momento de la vida en la que se toman las hormonas es lo importante. Antes de los 50 años, lo “normal” es que el cuerpo esté hormonado y no aumentan los riesgos. Es a partir de los 50 años cuando aumentan. Tanto más cuanto mayor es la exposición a las hormonas – años de tratamiento y dosis-.

      Un saludo.

      Antón.

  3. Por qué nadie habla de la sexualidad en la menopausía??. Tanta libertad para hablar de sexo, y parece que cuando se nombra la menopausía y sus consecuencias, nadie se atreve a decir qué pasa con la líbido, orgasmos, etc.

    1. Antón Millet

      Es un tema complejo. En general la sexualidad femenina se comprende peor que la del hombre que es más “mecánica”. Varios factores confluyen en la menopausia para dificultar la sexualidad.

      En nuestros blogs tienes una referencia al tema:

      http://blogs.lasprovincias.es/saludenfemenino/2015/03/10/te-duele-otra-vez-la-cabeza-carino-perspectiva-de-un-ginecologo/

      Lo último que he leído respecto a la flibanserina no es muy optimista: parece que tiene más efectos secundarios de los esperados…

Los comentarios están cerrados.

Ir arriba