Cuando el vello, el sebo y las células muertas de la piel se juntan forman una especie de argamasa y crean un tapón en un poro. Las bacterias normalmente presentes en la piel, y por tanto también presentes en el tapón, comienzan a crecer más deprisa gracias a la abundancia de sustancias que favorecen su crecimiento y producen la inflamación o hinchazón. Cuando el tapón comienza a deshacerse, se transforma en una espinilla. La mayorías de los granos/ espinillas se producen en la cara, cuello, espalda, el pecho y los hombros, por ser estas las zonas de la piel en las que más grasa se produce, y donde coinciden otros factores como el vello.
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Clínica Millet - Clínica de la Mujer
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