Este año hemos pasado una Navidad totalmente inusual a la que solíamos estar acostumbrados, no ha habido cenas de empresa, ni grandes celebraciones con familiares ni amigos. Nos hemos podido reunir siguiendo las normas de seguridad establecidas por las autoridades sanitarias.
El mantenimiento de los buenos hábitos alimenticios y del ejercicio que tanto cuestan adquirirlos durante el año, son fundamentales para no agravar las consecuencias de los excesos navideños.
Durante estas fechas se producen muchísimos excesos “poco saludables” tanto en la comida como en la cena que se suele acompañar con el abuso de las bebidas alcohólicas. Todo esto nos puede provocar problemas gástricos, ardor, resaca y pesadez estomacal. El exceso de azúcar también nos puede disparar los nervios y problemas para conciliar el sueño.
Cuando finalizan estas fechas surgen los arrepentimientos por los excesos navideños y las promesas para volver a los buenos hábitos alimenticios y realización de ejercicio. En los propósitos de Año Nuevo la pérdida de peso siempre ocupa un lugar preferente.
¡¡¡Pero no todo van a ser malas noticias!!! En la mayoría de las ocasiones los kilos adquiridos durante este periodo no son crónicos, volviendo a la rutina normal de alimentación saludable y ejercicio nos va a ayudar a perder peso. En esta época surgen muchas “dietas milagros” y muchos consejos de personas no especializadas en Nutrición, olvidad todo esto porque eso NO EXISTE, siempre conlleva el efecto rebote!!!!
Las rutinas nutricionales son importantísimas, debemos agrupar los alimentos a lo largo de cinco comidas diarias, así evitaremos tener largos periodos de tiempo en ayunas y la ansiedad que pueda producirse. Debemos sustituir el azúcar y las grasas por verduras, productos frescos, frutos secos… mediante recetas sencillas y de fácil elaboración.
El sueño también es un factor fundamental a la hora de equilibrar el organismo. Se ha demostrado en numerosos estudios realizados por profesionales que las personas que duermen poco comen más.
Todos estos cambios que vamos a realizar tienen que estar acompañados por paciencia y fuerza de voluntad. Es necesario que mantengamos la calma ya que los kilos aumentados en este periodo no van a desaparecer a la misma velocidad que los hemos cogido.
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