¿ Por qué es positiva la educación maternal?
Varios estudios científicos recogidos en una Revisión Bibliográfica de la Biblioteca Cochrane, demuestran que las mujeres que acuden a educación maternal adquieren mayor número de conocimientos con respecto al embarazo, el parto y la crianza. Asimismo, aumenta la capacidad para aplicar los conocimientos adquiridos, la seguridad en si mismas y en el proceso.
Según un estudio de Mehdizadeh del 2005, también se observó una menor duración del trabajo de parto en aquellas mujeres que habían acudido a educación maternal.
¿Qué beneficios aporta el ejercicio físico durante el embarazo?
Las mujeres que practican ejercicio físico durante el embarazo de manera regular tienen:
Menos partos instrumentados
Menos cesáreas.
Menos necesidad de epidural
Partos más cortos
Menos necesidad de recurrir a la rotura de la bolsa de las aguas.
Todos estos datos, hacen que la recomendación de la práctica de ejercicio físico a las embarazadas, sea universal. De hecho, diversas sociedades científicas internacionales recomiendan que: “Las mujeres sin ninguna complicación médica pueden realizar de manera segura 30 min o más de actividad física de intensidad moderada todos, o casi todos los días de la semana”.
¿Por qué es beneficioso el pilates dutrante el embarazo?
El método Pilates, por sus características particulares, supone una excelente opción durante el embarazo para realizar el ejercicio recomendado por los expertos.
Al trabajar el cuerpo con éste método adaptado al embarazo, consigues, entre otras cosas:
Una Correcta alineación corporal. Cuerpo más estilizado.
Una Mayor Tonificación y fuerza muscular.
Mayor rango de movimiento del cuerpo
Recuperar y mejorar la flexibilidad
Un Mayor entendimiento de la respiración
Mejoría del sistema circulatorio
Tonificación del suelo pélvico
Disminuir las molestias musculo-esqueléticas y lumbares propias del embarazo
¿Por qué es tan importante trabajar el suelo pélvico?
El embarazo y el parto someten al periné a una gran sobrecarga, pudiendo llegar a producir lesiones de mayor o menor importancia:
Incontinencia urinaria
Retención de orina (la vejiga no se vacía completamente)
Laxitud de la vulva (ruido de gases vaginales)
Vaginismo y dolor durante las relaciones sexuales
Incontinencia fecal
Estreñimiento
Prolapsos
Hemorroides
El entrenamiento del suelo pélvico, puede minimizar e incluso evitar que se produzcan algunos de estos problemas.
Los beneficios que proporciona en nuestra vida diaria, hace que cualquier momento de la vida sea idóneo para realizar los ejercicios del suelo pélvico, pero es durante el embarazo y tras el parto, cuando adquieren mayor importancia.
¿Influye mi actitud postural en la posición de mi bebé?
Todo el mundo entiende que si un bebé está de nalgas o en posición transversa, no son posiciones adecuadas para nacer, y debería de practicarse una cesárea para evitar complicaciones.
Además de las versiones externas, existen posiciones y técnicas que puedes intentar para que el bebé se coloque de cabeza.
Pero, ¿qué ocurre cuando el bebé ya está puesto de cabeza?, ¿hay solo una posición?, ¿todas son igual de buenas?
Al final del embarazo, las posiciones que tomes pueden influir en la colocación final del feto. Si tiendes a inclinarte hacia delante, tu bebé colocará su espalda coincidiendo con tu vientre. Al encajar la cabeza desde esta posición, presentará el occipucio (porción más favorable).
Pero si sueles estar reclinada hacia atrás (como en una hamaca), el bebé colocará su espalda coincidiendo con la tuya y al encajarse, la presentación de la cabeza será menos favorable.
Un buen asesoramiento en las posiciones y actitudes adecuadas te puede ayudar a colaborar en la colocación de la cabeza de tu bebé.
Maria José Pau y Ester Furnieles • Matronas
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Clínica Millet - Clínica de la Mujer
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